¿Tienes unos colores entre algún cajón de tu escritorio?
¡Ve y sácalos ahora mismo!
Dale vida a esa hoja en blanco que está frente a ti.
Haz un trazo con el primer color que elijas y luego, en tus manos todo un arco iris de luz y color.
Cualquier cosa que pintes es tú creación, sale de ti, de lo más profundo de tu ser, que por fin tiene un espacio para sí, para darse, para mostrarse.
Permite que se revele, que juegue, mientras tus manos como bailarinas danzantes se mueven con gracia y facilidad.
Toda una pista de baile, hecha de papel y de sueños.
Todo empezó con un trazo, así mismo empieza ya a colorear tu vida, con un trazo de alegría rosa, un amarillo de juventud, un rojo de pasión y un morado de amor.
Escrito por: Jeannette Romero